Sobreprecios y desabastecimiento: Para los supermercadistas deberían fortalecer los controles sobre los alimentos
Todos se pasan la pelota. Los presentantes de los supermercados sostienen que las fabricantes de alimentos enviaron en el mes listas de precios con subas del 7% promedio y con un retaceo importante de productos incluidos en Precios Cuidados. “Si en líneas generales nos mandan solo el 40 por ciento de lo que pedimos, Arcor y Molinos Río de la Plata envían 3 de cada 10 de lo solicitado”, explicó a BAE Negocios un supermercadista de diálogo permanente con funcionarios del Gobierno nacional. “Es más fácil ver los faltantes en góndolas que los incumplimientos en la puerta de la fábrica”, cuestionó el dirigente con la mira puesta en los controles que ejerce la Secretaria de comercio interior. Por su parte, las fabricantes acusan a los super de sobrestockearse.
En este escenario, Roberto Feletti recibirá este viernes a las alimenticias con tres objetivos: anticipar senderos de aumentos, garantizar el abastecimiento para la canasta de cercanía y la trazabilidad del aceite.
Cada 15 días, las cadenas de supermercados informan cómo vienen los stocks de los productos incluidos en las canastas oficiales. “O están produciendo menos o derivan hacia otros canales”, indican desde las cadenas de comercialización pero ahora también apuntan un poco hacia Comercio interior. “Para ellos es más fácil controlar sobre el final de la cadena que en el resto de los eslabones”, insisten desde la Asociación de Supermercados Unidos (ASU).
Desde la cartera que conduce Feletti argumentan que bajo sus registros, los niveles de abastecimientos son otros. “Los cálculos se realizan sobre el abastecimiento normal, no sobre pedidos excedentes para evitar el acopio”, afirmaron a este diario. Bajo esta premisa, Molinos cumpliría en un 65% y Arcor en un 73%.
De todas maneras, las grandes fabricantes de alimentos, como Molinos, Arcor, Unilever, Mondelez, Danone, Mastellone y Nestlé, se sentarán este viernes en Comercio interior para analizar la cuestión del abastecimiento en góndola en grandes supermercados y también avanzar con la canasta de cercanía. Feletti estima que debería estar efectiva en tres meses, en todo el país.
Y más allá que las grandes comercializadoras le reclaman más controles a Comercio interior, ambas partes parecen coincidir en un diagnóstico. “Varias de las compañías señaladas no quieren producir para precios regulados. Quieren ganar mucho y producir poco”, enfatizaron a BAE Negocios desde la cartera que conduce Feletti.
Por otro lado, su publicó en el Boletín Oficial la lista de los cortes de carne a precios regulados. El asado de tira deberá encontrarse en góndola a 679 pesos el kilo, cuando el Indec registró que en marzo se ubicó en el Gran Buenos Aires en los 971 pesos. Algo similar ocurre con la paleta. Según la resolución publicada el viernes, tendría que comercializarse en supermercados en 699 pesos, frente a los 898 pesos detectado por el Indec.