Sergio Massa cierra la campaña con Axel en Provincia con sello peronista
Sergio Massa arrancará este martes un esquema de cierre escalonado de la campaña electoral con una gran celebración del Día de la Lealtad junto al gobernador Axel Kicillof en la cancha de Arsenal, en Sarandí. Funcionará como último acto masivo en la provincia de Buenos Aires, con la idea de volver a mostrar el músculo del peronismo en el territorio, un dato que en algún momento la oposición puso en duda y en Unión por la Patria creen haber dejado bien claro con los últimos encuentros y la caravana realizada en el Conurbano el fin de semana pasado. Por el peso del padrón, en la geografía bonaerense se jugará buena parte de la suerte del oficialismo en el país y mucho del esfuerzo de la última semana estará puesto allí.
«Es un acto muy importante porque va a estar el candidato Sergio Massa, pero también todas las expresiones del movimiento sindical, los intendentes de toda la provincia y los candidatos; es un cierre de campaña en provincia que nos da mucha energía», adelantó Kicillof en diálogo con El Destape Radio sus expectativas respecto al encuentro, en alguna manera parecido al que se hizo un par de semanas atrás en la cancha de Cambaceres también con la organización principal de los intendentes de Avellaneda, Jorge Ferraresi, y de Ensenada, Mario Secco, a los que se sumaron otros intendentes, gremios y movimientos sociales. Aquel acto salió muy bien y esperaban repetir, con entusiasmo agregado por el 17 de Octubre y por lo poco que falta para las elecciones.
«No voten a los que quieren destruir a esta provincia. Es un desastre lo que proponen. Que el malhumor o el descontento no nos gane. Hay que mejorar. Lo pido encarecidamente, investiguen y reflexionen», pidió el gobernador a los bonaerenses. Luego de aquel encuentro en Ensenada, el peronismo apostó a exhibir su poder territorial con una caravana que arrancó en el «kilómetro cero» en Berisso que terminó en La Matanza, pero principalmente pudo mostrar al oficialismo unido y poner a un costado las tensiones internas de los últimos tiempos. En La Plata aseguraban que las encuestas encontraban a Axel bien posicionado, pero decían desconocer qué daño pudo haber provocado el caso que involucró a Martín Insaurralde, rápidamente resuelto por Massa y Kicillof.
En el acto de hoy no estará presente la vicepresidenta Cristina Kirchner, que mantendrá hasta el último tramo de la campaña su decisión de dejarle el protagonismo a los candidatos. «Si ella aparece es otra cosa y empezamos a hablar de ello y no de los candidatos», explicó Secco, uno de los impulsores de aquel «operativo clamor» de principios de año que buscó generar las condiciones para que la vice se postule. Ahora su posición es bien distinta y se muestra como uno de los apoyos más activos del gobernador.
El acto está convocado para las 16. En la elección de Arsenal hay un significado especial porque en ese lugar fue donde CFK lanzó Unidad Ciudadana en 2017. Quien sí estará en Sarandí será el presidente del PJ Bonaerense y primer candidato a diputado, Máximo Kirchner, aunque, en principio, no estaba previsto que hable. Así como a Secco, por su rol de anfitrión, le tocó abrir el acto de días atrás en Ensenada, en este caso la apertura la hará Ferraresi. Luego le dará la palabra a Kicillof y el cierre estará a cargo de Massa. «Mucha unidad, mucha militancia y encolumnarse detrás de los candidatos. Somos militantes y vamos a defender nuestro espacio político», afirmó Secco en la previa.
Para Kicillof funcionará como el cierre masivo de su campaña. El miércoles se ocupará del interior bonaerense en una recorrida por las obras de dragado del río Salado, una megainversión muy reclamada por el interior productivo y que esta gestión encaró pese a su alto costo y escasa visibilidad, dado que es algo que no se aprecia a simple vista. Por eso, el gobernador decidió ponerla de relieve en el cierre para el interior bonaerense. El jueves, último día antes de la veda, se acoplará a la estrategia nacional y realizará una actividad con trabajadores en una fábrica, ya sea con Massa presente o a través de una comunicación virtual. La diferencia que UP consiga en la Provincia resultará vital. Por un lado, para asegurar la reelección de Kicillof. Por el otro, para apuntalar las chances del candidato presidencial de acceder al balotaje.
El miércoles, Massa seguirá con su cierre de campaña escalonado en la ciudad de Buenos Aires, acompañando al candidato a jefe de gobierno, Leandro Santoro, en el escenario del Luna Park. Santoro se está jugando las posibilidades de entrar a una segunda vuelta contra Jorge Macri -los sondeos lo muestran en carrera- y lo que suceda en esta última semana probablemente resulte determinante. La apuesta final es a un acto masivo y militante en el emblemático y porteño «Luna», que muestre el respaldo de todo el oficialismo al candidato en CABA.
Para el jueves, Massa optó por esquivar las grandes movilizaciones y buscar una postal de mayor valor simbólico. Realizará una actividad con trabajadores en una fábrica para poner de relieve que es el único candidato con un proyecto productivo y de desarrollo, que habla a favor de recuperar el empleo y el poder adquisitivo. «El presidente de los trabajadores», lo plantean en el comando de UP, algo que -argumentaban- quedó claro con la decisión de eliminar el impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría y la devolución del IVA para las compras básicas de los salarios más bajos, proyectos rechazados en Juntos por el cambio. Lo más probable era que se eligiera una fábrica del interior del país, por lo que quedaba abierta la posibilidad de que los gobernadores lo acompañaran vía zoom, con actividades similares desde sus provincias.