El Presidente Alberto Fernández confirmó que se otorgará un bono a trabajadores públicos y privados
Desde Paris, el presidente Alberto Fernández anunció que el Gobierno lanzará un bono que se cobrará por única vez destinado a trabajadores formales como paliativo para combatir la inflación. Aún resta definir el monto y el corte que se hará de la población trabajadora, pero aseguró que la medida podrá ser percibida por el sector.
Lo hizo en conferencia de prensa desde el segundo piso de la embajada argentina, ante un escritorio pequeño que solo sostenía una copa de agua. Relajado, y con algunos chistes, el Presidente evitó responder si será candidato en las elecciones de 2023, habló sobre la postulación de Cecilia Todesca a la titularidad del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y brindó detalles de la gira que inició en Paris y que continuará en Bali, Indonesia, donde participará del G20 y tendrá una serie de bilaterales importantes.
De esta manera, Fernández dio por terminado el debate que surgió al interior del Frente de Todos, impulsado por el reclamo de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien exige una suma fija en lugar de una asistencia única. Un nuevo parte aguas que en lo que supo ser la fórmula presidencial que se impuso en 2019.
Si bien evitó hablar de una posible reelección, aseguró que hará «todo lo que deba hacer» para que Juntos por el Cambio no triunfe en 2023.
A continuación, un fragmento de la conferencia:
— ¿Por qué el Gobierno optó por el bono para trabajadores y no por la suma fija? Algunos socios del Gobierno venían reclamando eso, sabemos que hay una situación compleja en tema inflación orillando los 100 puntos, y esa diferencia entre bono y suma fija, uno es más eventual y el otro más permanente, ¿por qué eligió eso?
— Basicamente porque en la Argentina las paritarias funcionan plenamente y hay que dejarlas funcionar. Han tenido en cuenta la realidad e interferir con una suma fija a los salarios más bajo genera muchos problemas en muchos lugares porque los salarios más bajos están en los municipios y en los pequeños comercios, y el riesgo que se corre es generar un problema fiscal en los municipios y en muchos pequeños comercios que, no tengo ninguna duda, lo resolverían haciendo que sus empleados salgan de la formalidad y pasarlos a la informalidad.
Nosotros tenemos que recuperar el salario de todos, incluyendo a los de más bajos ingresos, y confiamos en que el método de la paritaria es el adecuado. En la emergencia, llegando a fin de año, entendemos que hay salarios más postergados y a ellos vamos a tratar de ir en su auxilio con un bono.
— ¿De cuánto?
— Cuando lleguemos a Buenos Aires lo vemos.
— Se va a cumplir justo un año del acto del Día del Militante en el que usted planteó dirimir las candidaturas en una gran interna, todas las candidaturas, no solo la presidencial. Le quería consultar si sigue pensando lo mismo. Si mantiene esa idea. Si confía en sus posibilidades de ser reelecto. Y a la luz de los cuestionamientos, algunos surgidos desde La Cámpora, desde el kirchnerismo, si puede eventualmente declinar su candidatura o de qué depende si va a ser o no candidato.
— Muy simple, lo que yo dije el 17 de noviembre es lo que creo. La verdad es que creo que esa idea que tuvo Cristina de poner las PASO fue una gran idea para abrir los partidos políticos y que los partidos políticos no se conviertan en un lugar cerrado de los dirigentes. Yo valoro mucho, lo dije en aquel entonces cuando la ley salió y lo vengo defendiendo desde siempre.
Después el resto son todas especulaciones, falta un año y no sabemos qué va a pasar de acá a dentro de un año. Yo tengo una preocupación que es que no vuelvan a ganar los mismos que pusieron a la Argentina de rodillas frente al mundo y hundieron a vastos sectores de la sociedad argentina en la pobreza y en la miseria y endeudaron a la Argentina durante generaciones. No quisiera que ellos vuelvan a gobernar la Argentina. Y para eso haré todo lo que deba hacer para que eso ocurra. Todo lo que deba hacer.
— Se hizo la presentación formal de Cecilia Todesca para la presidencia del BID. Si nos puede contar el objetivo, la intención. Y además esto requiere una negociación en términos regionales porque hay un candidato de Brasil, porque hay varios candidatos. Si está trabajando, si hubo conversaciones y cómo va a evolucionar en todo caso la negociación por el BID.
— Nosotros fuimos muy críticos de la actitud de Estados Unidos cuando puso a Claver-Carone de presidente del BID. Rompió una tradición de muchos años, desde su creación, de que la presidencia del BID estaba en manos de países latinoamericanos. La ruptura de ese acuerdo siempre quise que viniera por una decisión del gobierno americano de dejar sin efecto esa propuesta y volver a llamar a elecciones para que Latinoamérica elija un candidato. Pero no ocurrió. El presidente que propuso los Estados Unidos se fue por otros motivos.
El BID fue creado en el año 59, la Argentina es uno de los principales accionistas, junto con Brasil tiene el 11% de las acciones. Somos los segundos después de Estados Unidos que tiene alrededor del 30% de las acciones. Desde el año 59 la Argentina jamás presidió el BID. Quise además que sea una mujer la que pueda llegar a presidir el BID. ¿Por qué Cecilia Todesca? Porque la conozco muchísimo, sé de sus cualidades personales, sé de su capacidad técnica, sé de su inmensa honestidad, y sé que puede ser una maravillosa presidenta del BID que no solo la va a aprovechar Argentina sino que la va a aprovechar todo el continente.
Estamos conversando, porque también lo que queremos no es imponer un candidato, es tratar de lograr un consenso donde todos veamos en ese candidato al mejor candidato para la región. Nosotros creemos que en los tiempos que vive el mundo y en la historia que el BID tiene la Argentina ha propuesto una gran candidata para presidir el BID. Que es mujer, algo que el mundo también reclama. Y que tiene una mirada regional absolutamente integradora, algo que América Latina y el Caribe necesitan.
El detalle del paso de Alberto Fernández por Paris y sus expectativas camino al G20
Durante su estadía en Paris, el jefe de Estado expuso en el Foro por la Paz, mantuvo una bilateral con su par frances, Emmanuel Macron, y formó parte de la reunión entre negociadores oficialistas y opositores de Venezuela en la que se reestableció el diálogo, quebrado desde 2021.
El cronograma de viaje detalle que el próximo domingo, la delegación presidencial viajará rumbo a Indonesia. Camino al G20, el mandatario protagonizará una serie de bilaterales y reuniones de peso en las que llevará la preocupación por el uso de armas nucleares y la posibilidad que de que se bombardeen centrales energéticas nucleares.
«Nos vamos mañana para Bali, y vamos a ver de seguir las conversaciones sobre el tema Ucrania y el tema Rusia y ver si podemos encontrar soluciones que es lo que más nos preocupa. No es un buen momento para una guerra, el mundo ha padecido demasiado con la pandemia como para que ahora las mueres sobrevengan ya no por un virus sino por las balas o los bombardeos de ejércitos«, planteó en el incio de la conferencia.
Las restantes consultas hechas:
— En la reunión que mantuvieron con los negociadores de Venezuela se habló de un relanzamiento de las negociaciones y esto implica que los negociadores hacen su propia agenda sobre lo que tienen que resolver ellos y los cuatro presidentes actúan como facilitadores. Ahora, hay un andarivel donde seguramente se va a necesitar otro protagonista que es el andarivel por el cual se debería negociar que termine el bloqueo económico y las sanciones financieras. Ese andarivel fundamentalmente está protagonizado por Estados Unidos a partir de las sanciones financieras. En ese contexto, ¿antes de la reunión, o quizás después, va a haber algún contacto con la Casa Blanca, con el Departamento de Estado, con la Secretaria del Tesoro, para ustedes como facilitadores empezar a facilitar que al momento de la negociación entre los dos representantes de Venezuela esto empiece a distenderse para trabajar en paralelo con el otro aspecto que es político y derechos civiles?
— El Consejo de Seguridad de los Estados Unidos sabe perfectamente mi posición en este punto y sabe perfectamente cuál ha sido mi planteo permanente respecto de este tema. Con lo cual podré llamarlo una vez más y decirle por enésima vez lo que creo. Lo que a mí me parece que ayer logramos es que vuelvan a sentarse a una mesa los que tienen que discutir, los venezolanos. Si los venezolanos se ponen de acuerdo se van a dar cuenta las dos partes, una de las partes lo tiene más claro que la otra me parece, que las sanciones económicas no afectan centralmente al gobierno de Venezuela sino que afectan al pueblo de Venezuela.
La cantidad de migrantes que tiene Venezuela tiene que ver con el hecho de que las condiciones de vida allí se hicieron muy difíciles como consecuencia de esas condiciones económicas en las que Venezuela quedó atrapada. Las sanciones económicas no son solo de los Estados Unidos, ayer mismo la Unión Europea prorrogó las sanciones a Venezuela. Con lo cual necesitamos que todos revisen este tema y necesitamos que las partes que están negociando, que son venezolanos, sean ellos los que pidan fundamentalmente devuélvanle a Venezuela los recursos que le han quitado. Devuélvanle la posibilidad de negociar con el mundo. Devuélvanle la posibilidad de volver a integrarse como nunca debió haber dejado de ser eso y que eso se concrete.
En todas las conversaciones con el Consejo de Seguridad de los Estados Unidos el tema Venezuela conmigo siempre estuvo presente y siempre le he dicho lo que yo particularmente creía que es exactamente lo mismo que dije ayer y exactamente lo mismo que diré mañana si la situación es la misma.
— ¿En este marco usted podría decir que en la última conversación que tuvo con Jake Sullivan que es el principal consejero de Seguridad de Biden trataron el asunto y ellos están proclives a avanzar o la respuesta fue vamos a ir viendo?
— No, la última conversación que tuve con Sullivan no versó sobre el tema Venezuela. De cualquier manera entiendo que es un tema complejo para los Estados Unidos y en todo caso hay que también respetar los tiempos de Estados Unidos para ver cómo se resuelve este problema. Y lo que creo, lo que espero es que tenga Estados Unidos la misma vocación que nosotros de que en Venezuela se recupere la convivencia democrática y la plena institucionalidad. Trabajamos para que en Venezuela ya no haya más denuncias por violaciones a los derechos humanos, ni haya más denuncias por proscripciones políticas; para que el sistema institucional funcione plenamente y el sistema de derechos humanos funcione plenamente.
— Una de las reuniones que usted va a tener en los próximos días en Bali será con Kristalina Georgieva, titular del Fondo Monetario Internacional, donde se va a tratar el tema de los sobrecargos y una posible reducción de ellos. A exacto un año que en el G20 de Roma hubo una promesa por parte del Fondo de que eso podía llegar a suceder y no se registraron avances, la consulta es si cree que esta oportunidad puntualmente puede haber novedades sobre ello, y también si cree que el FMI va a crear como hizo en su momento para la pandemia un fondo de emergencia pero en este caso vinculado a la guerra de Ucrania y su impacto en el mundo.
— En la última charla que tuve con Kristalina Georgieva telefónicamente le hice notar a Georgieva cómo los efectos de la guerra estaban dañando a todo el mundo, no solamente a Europa, no solamente a Rusia y a Ucrania, sino que a la Argentina concretamente la guerra le costó 5.000 millones de dólares como consecuencia del costo de la energía, como consecuencia del costo de los fertilizantes, como consecuencia del costo de los alimentos.
Le volví a plantear la necesidad de que de una vez por todas se revisen los sobrecargos que a nuestro juicio son mecanismos muy injustos que afectan a los países más castigados por las deudas y que en un caso como Argentina además es consecuencia de un endeudamiento absolutamente irresponsable que se tomó.
Ayer hablando con el presidente Macron le volví a plantear el tema de los sobrecargos. Le pedí que por favor Francia nos acompañe con el planteo. Y también le llamé la atención con un tema que por ahí no todos advierten que sobrecargos también está pagando Ucrania. Entonces creo que este es un muy buen momento para que como Kristalina Georgieva ha dicho públicamente más de una vez los programas sean revisados a partir de lo que ha ocurrido a partir de la guerra. Y seguramente será parte de la conversación porque será a continuación de esa conversación telefónica que tuve con ella donde todos estos temas los hablamos.
— Focalizando en el tema en la guerra en Ucrania, ¿piensa llevar una propuesta concreta a la Cumbre de Líderes del G20? ¿Va a ser compartida con el presidente Macron, la van a hacer pública los dos o la va a llevar adelante usted? Ayer mencionó que hace mucho tiempo que viene trabajando con Macron para tratar de encontrar una mesa de diálogo. ¿Analizaron la posibilidad de que usted y Macron se dirijan a algún punto del mundo, viajen a algún punto del mundo para encontrar justamente a las dos partes y ver si se puede llegar a un acuerdo?
— Entiendo que la propuesta no debe ser una propuesta de un país individual sino que debe ser una propuesta más amplia y por eso insisto en que la discusión salga del Hemisferio Norte y se traslade a todo el mundo. Cuando participamos en el G7 participó Argentina, participó la Unión Africana, participó India, participó Indonesia, y justamente la idea era decirle al G7 que ese no era un problema de la OTAN con Rusia ni era un problema de Europa con Rusia, ni era un problema de Rusia con los Estados Unidos, era un problema del mundo y que el Hemisferio Sur estaba pasándola muy mal.
En un escenario en el que la FAO está preanunciando una hambruna que va a alcanzar a 300 millones de habitantes que en su mayoría están en el Hemisferio Sur, vengo planteando que encontremos una solución entre todos y que salgamos de la lógica bélica de dos que se pelean y tratemos de buscar una solución global. Quiero que Argentina esté sentada en esa mesa de la solución porque quiero encontrar una solución, y lo que quedamos con el presidente Macron es hablar con otros líderes en el G20 para ver si podemos tener algún tipo de acciones ya más concretas en favor de constituir una mesa que recupere el diálogo y que empiece por el cese del fuego.
Cuando hablamos de tratar de recomponer una mesa de diálogo es parte de eso ¿no? El diálogo que hay que recomponer no es entre nosotros, es entre Ucrania y Rusia. Y que nosotros debemos ayudar a ese diálogo. Tenemos que trabajar para que ese diálogo se concrete. Y lo queremos es que cuanto antes se pueda lograr.
Desde Paris, el presidente Alberto Fernández anunció que el Gobierno lanzará un bono que se cobrará por única vez destinado a trabajadores formales como paliativo para combatir la inflación. Aún resta definir el monto y el corte que se hará de la población trabajadora, pero aseguró que la medida podrá ser percibida por el sector.
Lo hizo en conferencia de prensa desde el segundo piso de la embajada argentina, ante un escritorio pequeño que solo sostenía una copa de agua. Relajado, y con algunos chistes, el Presidente evitó responder si será candidato en las elecciones de 2023, habló sobre la postulación de Cecilia Todesca a la titularidad del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y brindó detalles de la gira que inició en Paris y que continuará en Bali, Indonesia, donde participará del G20 y tendrá una serie de bilaterales importantes.
De esta manera, Fernández dio por terminado el debate que surgió al interior del Frente de Todos, impulsado por el reclamo de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien exige una suma fija en lugar de una asistencia única. Un nuevo parte aguas que en lo que supo ser la fórmula presidencial que se impuso en 2019.
Si bien evitó hablar de una posible reelección, aseguró que hará «todo lo que deba hacer» para que Juntos por el Cambio no triunfe en 2023.
A continuación, un fragmento de la conferencia:
— ¿Por qué el Gobierno optó por el bono para trabajadores y no por la suma fija? Algunos socios del Gobierno venían reclamando eso, sabemos que hay una situación compleja en tema inflación orillando los 100 puntos, y esa diferencia entre bono y suma fija, uno es más eventual y el otro más permanente, ¿por qué eligió eso?
— Basicamente porque en la Argentina las paritarias funcionan plenamente y hay que dejarlas funcionar. Han tenido en cuenta la realidad e interferir con una suma fija a los salarios más bajo genera muchos problemas en muchos lugares porque los salarios más bajos están en los municipios y en los pequeños comercios, y el riesgo que se corre es generar un problema fiscal en los municipios y en muchos pequeños comercios que, no tengo ninguna duda, lo resolverían haciendo que sus empleados salgan de la formalidad y pasarlos a la informalidad.
Nosotros tenemos que recuperar el salario de todos, incluyendo a los de más bajos ingresos, y confiamos en que el método de la paritaria es el adecuado. En la emergencia, llegando a fin de año, entendemos que hay salarios más postergados y a ellos vamos a tratar de ir en su auxilio con un bono.
— ¿De cuánto?
— Cuando lleguemos a Buenos Aires lo vemos.
— Se va a cumplir justo un año del acto del Día del Militante en el que usted planteó dirimir las candidaturas en una gran interna, todas las candidaturas, no solo la presidencial. Le quería consultar si sigue pensando lo mismo. Si mantiene esa idea. Si confía en sus posibilidades de ser reelecto. Y a la luz de los cuestionamientos, algunos surgidos desde La Cámpora, desde el kirchnerismo, si puede eventualmente declinar su candidatura o de qué depende si va a ser o no candidato.
— Muy simple, lo que yo dije el 17 de noviembre es lo que creo. La verdad es que creo que esa idea que tuvo Cristina de poner las PASO fue una gran idea para abrir los partidos políticos y que los partidos políticos no se conviertan en un lugar cerrado de los dirigentes. Yo valoro mucho, lo dije en aquel entonces cuando la ley salió y lo vengo defendiendo desde siempre.
Después el resto son todas especulaciones, falta un año y no sabemos qué va a pasar de acá a dentro de un año. Yo tengo una preocupación que es que no vuelvan a ganar los mismos que pusieron a la Argentina de rodillas frente al mundo y hundieron a vastos sectores de la sociedad argentina en la pobreza y en la miseria y endeudaron a la Argentina durante generaciones. No quisiera que ellos vuelvan a gobernar la Argentina. Y para eso haré todo lo que deba hacer para que eso ocurra. Todo lo que deba hacer.
— Se hizo la presentación formal de Cecilia Todesca para la presidencia del BID. Si nos puede contar el objetivo, la intención. Y además esto requiere una negociación en términos regionales porque hay un candidato de Brasil, porque hay varios candidatos. Si está trabajando, si hubo conversaciones y cómo va a evolucionar en todo caso la negociación por el BID.
— Nosotros fuimos muy críticos de la actitud de Estados Unidos cuando puso a Claver-Carone de presidente del BID. Rompió una tradición de muchos años, desde su creación, de que la presidencia del BID estaba en manos de países latinoamericanos. La ruptura de ese acuerdo siempre quise que viniera por una decisión del gobierno americano de dejar sin efecto esa propuesta y volver a llamar a elecciones para que Latinoamérica elija un candidato. Pero no ocurrió. El presidente que propuso los Estados Unidos se fue por otros motivos.
El BID fue creado en el año 59, la Argentina es uno de los principales accionistas, junto con Brasil tiene el 11% de las acciones. Somos los segundos después de Estados Unidos que tiene alrededor del 30% de las acciones. Desde el año 59 la Argentina jamás presidió el BID. Quise además que sea una mujer la que pueda llegar a presidir el BID. ¿Por qué Cecilia Todesca? Porque la conozco muchísimo, sé de sus cualidades personales, sé de su capacidad técnica, sé de su inmensa honestidad, y sé que puede ser una maravillosa presidenta del BID que no solo la va a aprovechar Argentina sino que la va a aprovechar todo el continente.
Estamos conversando, porque también lo que queremos no es imponer un candidato, es tratar de lograr un consenso donde todos veamos en ese candidato al mejor candidato para la región. Nosotros creemos que en los tiempos que vive el mundo y en la historia que el BID tiene la Argentina ha propuesto una gran candidata para presidir el BID. Que es mujer, algo que el mundo también reclama. Y que tiene una mirada regional absolutamente integradora, algo que América Latina y el Caribe necesitan.
El detalle del paso de Alberto Fernández por Paris y sus expectativas camino al G20
Durante su estadía en Paris, el jefe de Estado expuso en el Foro por la Paz, mantuvo una bilateral con su par frances, Emmanuel Macron, y formó parte de la reunión entre negociadores oficialistas y opositores de Venezuela en la que se reestableció el diálogo, quebrado desde 2021.
El cronograma de viaje detalle que el próximo domingo, la delegación presidencial viajará rumbo a Indonesia. Camino al G20, el mandatario protagonizará una serie de bilaterales y reuniones de peso en las que llevará la preocupación por el uso de armas nucleares y la posibilidad que de que se bombardeen centrales energéticas nucleares.
«Nos vamos mañana para Bali, y vamos a ver de seguir las conversaciones sobre el tema Ucrania y el tema Rusia y ver si podemos encontrar soluciones que es lo que más nos preocupa. No es un buen momento para una guerra, el mundo ha padecido demasiado con la pandemia como para que ahora las mueres sobrevengan ya no por un virus sino por las balas o los bombardeos de ejércitos«, planteó en el incio de la conferencia.
Las restantes consultas hechas:
— En la reunión que mantuvieron con los negociadores de Venezuela se habló de un relanzamiento de las negociaciones y esto implica que los negociadores hacen su propia agenda sobre lo que tienen que resolver ellos y los cuatro presidentes actúan como facilitadores. Ahora, hay un andarivel donde seguramente se va a necesitar otro protagonista que es el andarivel por el cual se debería negociar que termine el bloqueo económico y las sanciones financieras. Ese andarivel fundamentalmente está protagonizado por Estados Unidos a partir de las sanciones financieras. En ese contexto, ¿antes de la reunión, o quizás después, va a haber algún contacto con la Casa Blanca, con el Departamento de Estado, con la Secretaria del Tesoro, para ustedes como facilitadores empezar a facilitar que al momento de la negociación entre los dos representantes de Venezuela esto empiece a distenderse para trabajar en paralelo con el otro aspecto que es político y derechos civiles?
— El Consejo de Seguridad de los Estados Unidos sabe perfectamente mi posición en este punto y sabe perfectamente cuál ha sido mi planteo permanente respecto de este tema. Con lo cual podré llamarlo una vez más y decirle por enésima vez lo que creo. Lo que a mí me parece que ayer logramos es que vuelvan a sentarse a una mesa los que tienen que discutir, los venezolanos. Si los venezolanos se ponen de acuerdo se van a dar cuenta las dos partes, una de las partes lo tiene más claro que la otra me parece, que las sanciones económicas no afectan centralmente al gobierno de Venezuela sino que afectan al pueblo de Venezuela.
La cantidad de migrantes que tiene Venezuela tiene que ver con el hecho de que las condiciones de vida allí se hicieron muy difíciles como consecuencia de esas condiciones económicas en las que Venezuela quedó atrapada. Las sanciones económicas no son solo de los Estados Unidos, ayer mismo la Unión Europea prorrogó las sanciones a Venezuela. Con lo cual necesitamos que todos revisen este tema y necesitamos que las partes que están negociando, que son venezolanos, sean ellos los que pidan fundamentalmente devuélvanle a Venezuela los recursos que le han quitado. Devuélvanle la posibilidad de negociar con el mundo. Devuélvanle la posibilidad de volver a integrarse como nunca debió haber dejado de ser eso y que eso se concrete.
En todas las conversaciones con el Consejo de Seguridad de los Estados Unidos el tema Venezuela conmigo siempre estuvo presente y siempre le he dicho lo que yo particularmente creía que es exactamente lo mismo que dije ayer y exactamente lo mismo que diré mañana si la situación es la misma.
— ¿En este marco usted podría decir que en la última conversación que tuvo con Jake Sullivan que es el principal consejero de Seguridad de Biden trataron el asunto y ellos están proclives a avanzar o la respuesta fue vamos a ir viendo?
— No, la última conversación que tuve con Sullivan no versó sobre el tema Venezuela. De cualquier manera entiendo que es un tema complejo para los Estados Unidos y en todo caso hay que también respetar los tiempos de Estados Unidos para ver cómo se resuelve este problema. Y lo que creo, lo que espero es que tenga Estados Unidos la misma vocación que nosotros de que en Venezuela se recupere la convivencia democrática y la plena institucionalidad. Trabajamos para que en Venezuela ya no haya más denuncias por violaciones a los derechos humanos, ni haya más denuncias por proscripciones políticas; para que el sistema institucional funcione plenamente y el sistema de derechos humanos funcione plenamente.
— Una de las reuniones que usted va a tener en los próximos días en Bali será con Kristalina Georgieva, titular del Fondo Monetario Internacional, donde se va a tratar el tema de los sobrecargos y una posible reducción de ellos. A exacto un año que en el G20 de Roma hubo una promesa por parte del Fondo de que eso podía llegar a suceder y no se registraron avances, la consulta es si cree que esta oportunidad puntualmente puede haber novedades sobre ello, y también si cree que el FMI va a crear como hizo en su momento para la pandemia un fondo de emergencia pero en este caso vinculado a la guerra de Ucrania y su impacto en el mundo.
— En la última charla que tuve con Kristalina Georgieva telefónicamente le hice notar a Georgieva cómo los efectos de la guerra estaban dañando a todo el mundo, no solamente a Europa, no solamente a Rusia y a Ucrania, sino que a la Argentina concretamente la guerra le costó 5.000 millones de dólares como consecuencia del costo de la energía, como consecuencia del costo de los fertilizantes, como consecuencia del costo de los alimentos.
Le volví a plantear la necesidad de que de una vez por todas se revisen los sobrecargos que a nuestro juicio son mecanismos muy injustos que afectan a los países más castigados por las deudas y que en un caso como Argentina además es consecuencia de un endeudamiento absolutamente irresponsable que se tomó.
Ayer hablando con el presidente Macron le volví a plantear el tema de los sobrecargos. Le pedí que por favor Francia nos acompañe con el planteo. Y también le llamé la atención con un tema que por ahí no todos advierten que sobrecargos también está pagando Ucrania. Entonces creo que este es un muy buen momento para que como Kristalina Georgieva ha dicho públicamente más de una vez los programas sean revisados a partir de lo que ha ocurrido a partir de la guerra. Y seguramente será parte de la conversación porque será a continuación de esa conversación telefónica que tuve con ella donde todos estos temas los hablamos.
— Focalizando en el tema en la guerra en Ucrania, ¿piensa llevar una propuesta concreta a la Cumbre de Líderes del G20? ¿Va a ser compartida con el presidente Macron, la van a hacer pública los dos o la va a llevar adelante usted? Ayer mencionó que hace mucho tiempo que viene trabajando con Macron para tratar de encontrar una mesa de diálogo. ¿Analizaron la posibilidad de que usted y Macron se dirijan a algún punto del mundo, viajen a algún punto del mundo para encontrar justamente a las dos partes y ver si se puede llegar a un acuerdo?
— Entiendo que la propuesta no debe ser una propuesta de un país individual sino que debe ser una propuesta más amplia y por eso insisto en que la discusión salga del Hemisferio Norte y se traslade a todo el mundo. Cuando participamos en el G7 participó Argentina, participó la Unión Africana, participó India, participó Indonesia, y justamente la idea era decirle al G7 que ese no era un problema de la OTAN con Rusia ni era un problema de Europa con Rusia, ni era un problema de Rusia con los Estados Unidos, era un problema del mundo y que el Hemisferio Sur estaba pasándola muy mal.
En un escenario en el que la FAO está preanunciando una hambruna que va a alcanzar a 300 millones de habitantes que en su mayoría están en el Hemisferio Sur, vengo planteando que encontremos una solución entre todos y que salgamos de la lógica bélica de dos que se pelean y tratemos de buscar una solución global. Quiero que Argentina esté sentada en esa mesa de la solución porque quiero encontrar una solución, y lo que quedamos con el presidente Macron es hablar con otros líderes en el G20 para ver si podemos tener algún tipo de acciones ya más concretas en favor de constituir una mesa que recupere el diálogo y que empiece por el cese del fuego.
Cuando hablamos de tratar de recomponer una mesa de diálogo es parte de eso ¿no? El diálogo que hay que recomponer no es entre nosotros, es entre Ucrania y Rusia. Y que nosotros debemos ayudar a ese diálogo. Tenemos que trabajar para que ese diálogo se concrete. Y lo queremos es que cuanto antes se pueda lograr.